Sobre
La vivienda ha sido y es una necesidad humana fundamental para el desarrollo espiritual, emocional y físico del hombre; así lo reseña la evolución de la historia humana. Con el desarrollo urbano de las ciudades, nuevas formas de vida y crecimiento poblacional desde 1830, la vivienda se transformó en una urgente necesidad y ha sido objeto de transformación desde lo tradicional a lo industrial prefabricado y moderno como respuesta del dinámico progreso industrial, humanístico, científico y tecnológico. Estos avances propiciaron mundialmente mejores condiciones existenciales, permitiendo que en la actualidad el crecimiento demográfico ya haya alcanzado los 7.800 millones de habitantes. Con ello, y a través del tiempo, se ha generado un gran déficit habitacional internacional con significativos impactos y afectaciones a los derechos humanos y al medio ambiente, producto de la exigente dinámica que caracteriza a la modernidad en procura de mejorar la calidad de vida con mejor movilidad, salud, alimentación, vestido, entre otros, conducentes a un intercambio de bienes y servicios que se interrelacionan a la enorme desigualdad entre los países ricos e industrializados respecto a los más pobres.